lunes, 17 de octubre de 2011

Coyoacán

¡Hola a todos!
Ayer estuvimos en Coyoacán, una de las 16 delegaciones que forman DF. Está al Sur, a tomar viento de casa. Opción de ir en taxi…o  en metro!  Juan, Julio (un amigo suyo que se viene a currar a México), Ana y yo decidimos “jugar” y tomar (que no coger) el temido metro de Ciudad de México. Precio: 3 pesos (0,18 EUR). Problemática según la gente: mucha inseguridad, mucho robo de carterista, mucha gente y mucho agobio.
Desde nuestra parada, Polanco, y hasta Coyoacán, según el plano de metro que os pongo es lógico ir hasta Mixcoan, hacer trasbordo allí y coger la línea 12.

Plano de Metro

Pues ahí íbamos los cuatro dispuestos a hacer el trayecto.
Llegados a Mixcoan, sin noticias del trasbordo. Primera reacción: vamos hacia la salida y seguro que ahí está el trasbordo. Craso error (como viene siendo ya habitual).
Segunda reacción: vamos a preguntar a alguien.
Un servidor: “Disculpe, ¿Dónde está el trasbordo hacia la línea 12?”
Una amable señora: “No, Señor, aquí no hay trasbordo.” Miro con cara de contrariado a Ana y le digo: “Esta tía no se entera.”
Segundo intento:
Un servidor: “Disculpe, ¿Dónde está el trasbordo hacia la línea 12?”
Un “apuesto” caballero: “No, Señor, aquí no hay trasbordo.” (Mi cara, era similar a la de Bob Esponja)
Un servidor: “Pero… ¡si el plano dice que hay trasbordo!”
El “apuesto” caballero: “Ah pues no, tiene que hacer el trasbordo en Tacubaya.”
No tranquilo, volví a preguntar una tercera vez. Vuelta a mi cara de Bob y a escuchar la misma respuesta. Conclusión: en DF no hay que hacer caso al plano de metro.
Con respecto a este, está bastante limpio, hay bastantes Domino´s Pizza en los intercambios (ya hablaré un día de las comidas y mi teoría de que México no es un país para hacer un régimen), y, no sé si es porque era domingo o qué pero, nada de inseguridad y nada de bullicio. Como dato curioso, cada parada tiene asociada una imagen representativa de la zona. En Mixcoan, el dibujo era una serpiente; menos mal que no nos bajamos allí.  :S

Estación de Polanco

Al llegar a Coyoacán, acudimos al mercado de Plaza Allende donde, según la guía Lonely había un puesto de tostadas mexicanas. Aunque esté sitio estaba hasta la bandera y no pudimos comer en él, terminamos en un pequeño puestecito donde comimos quesadillas de nopales (cactus para los mortales) y queso y  tinga (carne parecida a la ternera) y queso. El precio, con bebida incluida, 2,80 EUR aprox.

Quesadilla de nopales y queso

Una vez con el estomago lleno decidimos ir a la casa de Frida Khalo, que residía en este barrio tranquilo y residencial de la capital.
Ya con el museo cerrado, volvimos a dar una vuelta al mercado. Me recordaba bastante a la plaza de abastos de Sanlúcar, sólo que con los pasillos más estrechos y con multitud de tiendas de disfraces para Halloween y de decoración para el famoso Día de los Muertos.

Jardín Casa Frida Khalo


¡Mañana más y mejor (segundo capítulo de las cosas surrealistas que ve mi móvil)!

1 comentario:

  1. el símbolo de las paradas de metro es para los analfabetos, para que sepan en qué parada están en cada momento sin necesidad de leer el nombre!

    ResponderEliminar