Hace dos semanitas, estuve en los States con Ana y con Juan. En concreto en uno de los destinos que solicité para irme este año: Miami.
Antes de nada, agradecer a todos los becarios de allí su hospitalidad y su dedicación en las 48 horas que estuvimos allí. Touché!
Miami, para quien no lo sepa se encuentra en el Estado de Florida, (que tiene forma de pistola, según mi mente perversa) al sureste de los EEUU, y sorprendentemente no tiene más de medio millón de habitantes.
El Viernes a las 15.00h agarramos un taxi rumbo al Benito Juárez, nuestro aeropuerto favorito. Íbamos con American Airlines así que en principio no esperábamos gran retraso en el vuelo.
Decidimos comprar en el Duty Free un par de botellas de tequila y de ron, lo típico; ya que nos habían avisado que el alcohol en EEUU es caro y malo en los bares (como pude comprobar). Primer contratiempo: por órdenes de la compañía, la tienda no puede venderte nada si vas a despegar en menos de 60 min. Así que nuestro gozo en un pozo y marchamos sin alcohol.
A la llegada a EEUU nos esperaban Inés y Pablo que nos llevaron a dónde nos quedaríamos a dormir: Purdy Ave (casa de David, Pita e Inés). Ducha rápida, pizzas cocinadas por Inés y botellón. Rumbo a un bar (del que no recuerdo el nombre) que tenía una barra para bailar y parecía un gimnasio (con barras para colgarte y hacer el mono). Y cómo no, vasitos de cumpleaños para las copas.
Algunos incluso acabaron en el suelo y más tarde emitiendo los ya famosos "alaridos de la muerte".
Viernes night: gran noche |
Paseito de tarde |
Miami Beach |
Ana, Inés, Juan y un servidor: "Los vigilantes de la Playa" |
El sábado noche, como estábamos bastante cansados estuvimos en casa de Pablo cenando y más tarde en un bar típico americano.
Juan y yo aprovechamos la diferencia horaria para ver un rato la final del Open de Australia. Cinco horas más tarde cuando nos despertábamos, la final seguía!!
El domingo, para rematar el fin de: NBA!!! Los Heat-Bulls! Todo un partidazo: los dos líderes de la Conferencia Este. La verdad que no me defraudó el espectáculo aunque sí un poco el juego.
American Airlines |
Heat-Bulls |
Tras escaparnos en el último cuarto porque no llegábamos al vuelo, vuelta al aeropuerto para volver al DeFectuoso; últimos problemillas: ni a Juan ni a mí nos emiten el billete del avión. A mí en concreto no me asignaba asiento. Tras unos momentos de tensión, todo se solucionó en un abrir y cerrar de ojos y tres horas más tarde andábamos en nuestro México lindo y querido.
Concluyendo, una gran ciudad para vivir con una muy alta calidad de vida y un buen clima y muy buen ambiente entre la gente que allí vive. Gracias a todos de nuevo por el fin de.
Skyline de Miami desde Purdy Ave. |
conoces algun servicio de Traslado aeropuerto miami?
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